COMPETICIÓN
La noche del sabado fue una noche muy especial, con un objetivo que para muchos es sinónimo de masculinidad, pero para mi es sinónimo de diversion y en caso de sobrepasarse, de ridículo (esa noche fue sinónimo de ridículo); el objetivo era beber alcohol, y así fue.
PARÉNTESIS
Esa noche llevaba unas semanas gestandose. Todo empezo varias sabados antes, también entonces ibamos borrachos, y alguien que no recuerdo dijo una frase: "yo soy capaz de beber mas que tu". Desconocíamos a quien iba dirijida la frase, al igual que desconocíamos por que se dijo eso, pero lo que si que conocíamos, es que el resto de personas que estábamos en la mesa, tuvimos la sensación que provoca ser retado a un duelo, así que todos recogimos el guante, hicimos dos equipos y juramos que el que perdiera, pagaría todas las birras del equipo rival.CIERRO PARÉNTESIS
Con los preámbulos aclarados, sigamos con la historia. Eramos 2 contra 2 (Billy&July VS Tito&Braulio), era una competición sin ningún tipo de importancia ni repercusión, y aún que para nosotros significara mucho, seguía siendo una competición de mierda.
Antes de empezar a beber, los cuatro players nos fuimos a cenar juntos. Fue una cena de mierda, de modo que no voy a explicar nada sobre ella.
Horas después de empezar a cenar, ya estabámos listos, habíamos llegado a la cantina del campo de fútbol (Cerveza barata. En una competición hay que recortar gastos), nos habian servido nuestras primeras cañas, todo estaba en marcha... al poco tiempo vino la segunda ronda... la tercera... la cuarta... la quinta... la sexta... la séptima... la octava... y así hasta que alguien dijo lo que todos queríamos oir: "Empate técnico". Nadie había ganado, aún que preferíamos pensar que nadie había perdido, sonaba infinitamente mejor.
Una vez finalizado el match, me levanté de la silla, entonces me paso lo que le pasa a toda persona que bebe de sentado... al ponerme en pie el mundo se vino abajo, esta situación me permitió darme cuenta de lo hijos de puta que fuimos por empezar ese absurdo duelo. Todas las cosas que hasta entonces habían estado quietas, empezaron a moverse dentro de mi cabeza. Sufría una intoxicación.
Mi cerebro, a modo de castigo, dejó de procesar información, por eso a partir de ahí solo puedo tirar de flashes para seguir con la historia.
1º FLASH: De repente estoy en la discoteca del pueblo, en mis manos hay un trofeo con forma de copa, una cerveza vertida dentro del mismo trofeo... y yo estoy bebiendo de ahí. Tan asqueroso como cierto.
2º FLASH: Tengo una cerveza entre manos, esta vez el contenedor es una botella de San miguel (la situación respecto al primer flash había mejorado ligeramente, algo parecía indicar que me estaba recuperando). Ya no tenía mi preciado trofeo, ¿Donde estaba?, no lo se, y dudo que algún dia llegue a recordarlo. Si algun hijo de puta se lo quedó, espero que le rebiente en la puta cara llevandoselo a el, y a sus seres queridos por delante.
3º FLASH: Salgó de la discoteca de mi pueblo, son las 5:30h. aprox. (y cuando digo aprox., lo que realmente quiero decir, es que no tengo ni puta idea de que hora era), y veo un burguer king abierto. Lo que vomite al día siguiente me confirma que no me paré a comer nada.
Podría rellenar lo que paso entre flash y flash con historias bonitas, con historias heroicas, con historias inolvidables... es decir, con mentiras. Por eso prefiero dejarlo todo como está, con sus patéticos flashes, con sus misteriosas lagunas y con la absurda esperanza de que algún día lo recordare todo, y será algo maravilloso, aún que seguramente sea una puta mierda.
Lo siguiente que recuerdo es mi toma de contacto con la cruda realidad a las 14:00h. del día siguiente. Me levante y me mire al espejo, durante unos segundos sentí vergüenza, en ese momento no recordaba absolutamente nada de la noche anterior, y como todo hombre heterosexual, que no ve la bisexualidad como una opción realista, corri a mirarme el culo. No había sangre, lo que confirmaba que mi trasero no había sido invadido por ningún cuerpo extraño, ya que cualquier ataque traicionero en esa zona, genera sangre a borbotones, cuando se dispone de la virginidad de la que dispongo yo en ese campo de la vida.
Lo peor que me podía haber pasado ya habia sido descartado, todo lo demas lo podría superar con facilidad. Tras esta buenísima noticia, decidí prepararme la comida, pero como ya era de dia y el titulo del relato es "Noches", no me sale de los cojones seguir contando mi puta vida.
Conclusiones:
- Lo que importa no es participar, es ganar. El que diga lo contrario es un perdedor.
- Si la cosa acaba en empate, en realidad todo el mundo ha perdido, ya que nadie se siente ganador.
- Si no recuerdas algo, no te esfuerces. El cerebro es muy hijo de puta y te ira enviando flashes que seras incapaz de unir con nexos coherentes, es entonces cuando debes esforzarte en vincular esos flashes.
- Ponte siempre en lo peor, cuando veas que lo peor que te podria haber pasado no te ha pasado, la noche pasa a convertirse automaticamente en una noche estupenda, incluso si no la recuerdas.
Antes de empezar a beber, los cuatro players nos fuimos a cenar juntos. Fue una cena de mierda, de modo que no voy a explicar nada sobre ella.
Horas después de empezar a cenar, ya estabámos listos, habíamos llegado a la cantina del campo de fútbol (Cerveza barata. En una competición hay que recortar gastos), nos habian servido nuestras primeras cañas, todo estaba en marcha... al poco tiempo vino la segunda ronda... la tercera... la cuarta... la quinta... la sexta... la séptima... la octava... y así hasta que alguien dijo lo que todos queríamos oir: "Empate técnico". Nadie había ganado, aún que preferíamos pensar que nadie había perdido, sonaba infinitamente mejor.
Una vez finalizado el match, me levanté de la silla, entonces me paso lo que le pasa a toda persona que bebe de sentado... al ponerme en pie el mundo se vino abajo, esta situación me permitió darme cuenta de lo hijos de puta que fuimos por empezar ese absurdo duelo. Todas las cosas que hasta entonces habían estado quietas, empezaron a moverse dentro de mi cabeza. Sufría una intoxicación.
Mi cerebro, a modo de castigo, dejó de procesar información, por eso a partir de ahí solo puedo tirar de flashes para seguir con la historia.
1º FLASH: De repente estoy en la discoteca del pueblo, en mis manos hay un trofeo con forma de copa, una cerveza vertida dentro del mismo trofeo... y yo estoy bebiendo de ahí. Tan asqueroso como cierto.
2º FLASH: Tengo una cerveza entre manos, esta vez el contenedor es una botella de San miguel (la situación respecto al primer flash había mejorado ligeramente, algo parecía indicar que me estaba recuperando). Ya no tenía mi preciado trofeo, ¿Donde estaba?, no lo se, y dudo que algún dia llegue a recordarlo. Si algun hijo de puta se lo quedó, espero que le rebiente en la puta cara llevandoselo a el, y a sus seres queridos por delante.
3º FLASH: Salgó de la discoteca de mi pueblo, son las 5:30h. aprox. (y cuando digo aprox., lo que realmente quiero decir, es que no tengo ni puta idea de que hora era), y veo un burguer king abierto. Lo que vomite al día siguiente me confirma que no me paré a comer nada.
Podría rellenar lo que paso entre flash y flash con historias bonitas, con historias heroicas, con historias inolvidables... es decir, con mentiras. Por eso prefiero dejarlo todo como está, con sus patéticos flashes, con sus misteriosas lagunas y con la absurda esperanza de que algún día lo recordare todo, y será algo maravilloso, aún que seguramente sea una puta mierda.
Lo siguiente que recuerdo es mi toma de contacto con la cruda realidad a las 14:00h. del día siguiente. Me levante y me mire al espejo, durante unos segundos sentí vergüenza, en ese momento no recordaba absolutamente nada de la noche anterior, y como todo hombre heterosexual, que no ve la bisexualidad como una opción realista, corri a mirarme el culo. No había sangre, lo que confirmaba que mi trasero no había sido invadido por ningún cuerpo extraño, ya que cualquier ataque traicionero en esa zona, genera sangre a borbotones, cuando se dispone de la virginidad de la que dispongo yo en ese campo de la vida.
Lo peor que me podía haber pasado ya habia sido descartado, todo lo demas lo podría superar con facilidad. Tras esta buenísima noticia, decidí prepararme la comida, pero como ya era de dia y el titulo del relato es "Noches", no me sale de los cojones seguir contando mi puta vida.
Conclusiones:
- Lo que importa no es participar, es ganar. El que diga lo contrario es un perdedor.
- Si la cosa acaba en empate, en realidad todo el mundo ha perdido, ya que nadie se siente ganador.
- Si no recuerdas algo, no te esfuerces. El cerebro es muy hijo de puta y te ira enviando flashes que seras incapaz de unir con nexos coherentes, es entonces cuando debes esforzarte en vincular esos flashes.
- Ponte siempre en lo peor, cuando veas que lo peor que te podria haber pasado no te ha pasado, la noche pasa a convertirse automaticamente en una noche estupenda, incluso si no la recuerdas.
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